Dos socias, amigas y químicas son las creadoras de Idea-Tec, la primera pintura sustentable para pisos y muros elaborada con plumavit reciclado. Una apuesta basada en el upcycling —ganadora del premio de recursos naturales y medio ambiente Avonni 2019—, que promete cambiar el mundo de la pintura y de las mujeres en este rubro.
Por María Inés Manzo C. / Fotografía gentileza de Idea-Tec
Cristina Acuña y Constanza Cifuentes, ambas químicas de la Universidad de Chile, se conocieron en el grupo de investigación de tesis. Unos años después formaron una asociación de químicos con el fin de fomentar el emprendimiento en esa área. Si bien esta iniciativa no prosperó, en ambas quedó la motivación por hacer algo propio desde las ciencias.
Así, el 2014 nace Idea-Tec que busca crear tecnologías innovadoras desde la química para reciclar desechos que hoy no estén en el ciclo tradicional de reciclaje. “La Coni venía trabajando en el área industrial y yo era parte del área de I+D (Investigación y Desarrollo). Entonces si bien ninguna había emprendido, previamente, queríamos ser un aporte a nuestra sociedad y el medio ambiente. Comenzamos a estudiar los procesos de materiales que normalmente no se reciclan, pero no de los tradicionales como son las botellas PET. Queríamos innovar y conocer de fondo este mundo; y fue así como averiguamos que el plumavit nadie lo recibe ni recicla. Esto se debe, principalmente a que, es un material muy liviano y el costo de transportarlo es demasiado alto. Pero lo más preocupante es que actualmente en nuestro país se desechan entre dieciocho a veinte mil toneladas de plumavit al año que terminan en vertederos o directamente en el mar”, cuenta Cristina Acuña.
Es por eso que decidieron utilizar este plástico y transformarlo en otro producto para darle un valor agregado. Partieron probando en su laboratorio con pegamento y barniz, hasta que encontraron en la pintura un producto más efectivo y que les permitiera competir de manera justa en el mercado. “Nuestro primer prototipo fue una masa pegajosa, que perfectamente podía ser pegamento. Pero lamentablemente la industria en esta área es muy competitiva para una empresa tan pequeña. Luego, probamos con el barniz que si bien se veía muy bonito, con el paso del tiempo no cumplía su función. Como ya estábamos averiguando en esa línea, se nos abrió camino hacia la pintura, que tiene la misma normativa”.
Pronto se asesoraron con otros químicos del rubro para aprender hacer pinturas y crear su primera formulación. “Sabíamos que podíamos lograr un buen producto, y paralelamente comenzamos a postular a fondos de CORFO, a través de Startup Chile, ya que necesitábamos comprar maquinaria e instrumentos especiales. Gracias a estos fondos hemos podido ir creciendo”.
PLUMAVIT
Entre 2016 y 2017 desarrollaron los primeros galones de pintura para pisos y demarcación de calles, además de instalar la maquinaria especializada que convierte el plumavit en resina, que se utiliza como base para la pintura. Esta metodología de trabajo, fue la que luego las hizo ganadoras del premio Avonni 2019 de recursos naturales y medio ambiente. “Partimos trabajando en la aplicación industrial, y a fines del 2017 hicimos nuestras primeras ventas, gracias a las validaciones que obtuvimos. Empezamos a crecer rápidamente y a tener variados clientes desde contratista, a grandes empresas. Nuestra primera apuesta de pintura industrial fue a base de solvente, pero también quisimos desarrollar otra línea hogar para muros y a base de agua para poder usarlo en las casas, que lanzamos el 2019”.
Actualmente venden sus productos por su página web www.idea-tec.cl (con reparto para todo Chile y en Easy de La Reina en Santiago.
¿Hicieron un reajuste en la fórmula entre la línea industrial y hogar?
Así es. Químicamente hablando en la línea industrial el plumavit se derrite o disuelve sobre la base de solventes. En cambio para la línea base de agua no pasa esto. Hay un proceso que desarrollamos entre medio donde logramos transformar la pintura base solvente a base agua. Eso también significa que usamos cantidades distintas de plumavit: en la línea industrial es de un 20% y en la línea hogar de un 14% por cada tineta de pintura.
¿Cuánto plumavit han reciclado hasta la fecha?
Veinte tres toneladas, preestallido social y pandemia pensábamos que íbamos a duplicar este año. Recién estamos retomando nuestras ventas y esperamos seguir aumentando la cifra.
¿Han pensado desarrollar otros productos?
Sí, ese siempre fue el corazón de Idea-Tec y de la mano de materiales que no se están reciclando, pero ese es un sueño a largo plazo. Ahora estamos ciento por ciento enfocadas en potenciar la nueva línea hogar que se vio truncada por las crisis a nivel país.
¿De dónde obtienen el plumavit?
Hace varios años nos acercamos a Aislapol, que venden a gran escala planchas de plumavit para construcción. Ellos nos comenzaron a regalar sus muestras y sobrantes, que en un comienzo fue suficiente para abastecernos. Con el tiempo la gente nos ha ido conociendo y hay más empresas que nos traen material. A eso le añadimos que trabajamos con empresas de reciclaje domiciliarios que nos apartan el plumavit; y también trabajamos con el punto limpio de Renca.
¿Qué características debe tener para poder ser usado?
Es muy parecido a las botellas PET, en el sentido que no deben estar contaminadas. Sólo recibimos plumavit blanco (no puede ser amarillo ni negro), puede tener polvo, pero no excesivo, pero lo más importante es que no puede haber estado en contacto con comida rápida (pollo, papas fritas, carne, comida china, etc.). Una de las grandes propiedades que tiene el plumavit es su gran capacidad para absorber grasas y jugos. El problema es que para el reciclaje es imposible limpiarlo y queda al interior del material, no es superficial. Sí podemos recibir plumavit que haya almacenado champiñones, lechuga o cilantro, por ejemplo.
¿Cuáles son sus certificaciones?
Apostamos por la que para nuestro rubro nos parecía la más importante, que es certificación LEED (Leadership in Energy & Environmental Design) —en Chile fiscalizado por el portal verde Green Building Council (GBC) — que se preocupa de los estándares de eco eficiencia y que se cumplan los requisitos de sostenibilidad. Y para un futuro no descartamos postular a Empresas B.
Sus envases también tienen una mirada sustentable…
Sí, en el mundo de las pinturas lo más fácil de encontrar son los envases de plástico o plástico reciclado (aunque son la minoría), sobre todo en las tinetas de cinco galones. Por eso quisimos hacer la diferencia con el uso de envases metálicos en todos los formatos. Tenemos la tranquilidad que no estarán cientos de años en un relleno sanitario y, eventualmente, se degradarán. Hace un tiempo también empezamos a fomentar la reutilización de envases, que si bien no funcionó como esperábamos, estamos viendo cómo lograr motivar a los clientes.
SELLO FEMENINO
“Cuando nos reconocieron en los premiso Avonni, no sólo nos sentimos orgullosas por estar haciendo cambios en nuestro rubro, sino también como mujeres. El mundo de la pintura, y la construcción, en general, es un mercado liderado por hombres. Si bien no ha sido siempre fácil, el tiempo nos ha dado la razón y se ha demostrado que nuestros productos compiten a la par”.
“Además de la sustentabilidad nos encanta motivar a otras mujeres a que se atrevan con sus propios proyectos, de que no le teman al prejuicio y demuestren que ellas también pueden. Desde nuestra área química decidimos emprender, si bien hemos vivido altos y bajos lo importante es saber levantarse ante la adversidad. Por lo mismo ambas estamos estudiando para seguir mejorando el negocio. Queremos ser un referente, fomentar la investigación, innovación y el desarrollo”.
¿Ustedes son pioneras en la pintura a base de plumavit?
Sí, fue nuestra innovación y por eso pudimos patentar nuestro desarrollo a base de solventes y estamos en proceso con la de agua. Si bien otros han intentado hacer lo mismo, los años y la experiencia nos respaldan, porque hacer pinturas no es nada fácil. Como dicen por ahí, las buenas ideas se copian.
