Un aditivo descontaminante que limpia el aire, imitando el proceso de fotosíntesis, a través de nanotecnología, es la disruptiva propuesta de Photio. Startup científica y tecnológica que se ha posicionado como uno de los emprendimientos sustentables más galardonados del último tiempo.
Por María Inés Manzo C. / Fotografía Javiera Díaz de Valdés.
La contaminación atmosférica se mantiene como el principal problema ambiental para los chilenos y se calcula que más de doce millones de personas son afectadas, provocando alrededor de once mil muertes al año. A nivel mundial, las cifras no mejoran, pues nueve de cada diez personas respiran aire contaminado. Ante esta problemática, los ingenieros Matías Moya (30), Jaime Rovegno (32) y Constanza Escobar (27), crearon Photio, un aditivo descontaminante que replica los procesos que ocurren en la naturaleza, específicamente la fotosíntesis de plantas y árboles.
Es así que a través de nanotecnología han logrado transformar materiales de uso masivo, como pinturas, telas, plásticos, asfalto, hormigón e incluso cuero sintético, en verdaderos purificadores de aire. “Gracias a un innovador líquido que desarrollamos en nuestros laboratorios, Photio se puede mezclar directamente a distintos tipos de materiales y descontaminar el aire al tener contacto cualquier fuente de luz o radiación solar. Por ejemplo, una botellita (que equivale a 80 ml) sirve para un galón de pintura que cubre alrededor de veinte metros cuadrados. Es decir, representa un total de cuarenta árboles maduros condensados”, señala Matías Moya Alarcón, CEO, cofundador de Photio.
Ganador del MIT Innovator Under 35 otorgado por Massachusetts Institute of Technology en 2022, Matías también nos cuenta que esta tecnología no busca reemplazar los árboles, sino que apoyar su función natural y transformar a las ciudades, que hoy son fuentes de contaminación, en elementos positivos para el medio ambiente. “Soñamos con que los autos sean capaces de compensar sus emisiones… que las carreteras, edificios y casas sean capaces de purificar las ciudades contaminadas”.
CLIMATECH
Teniendo siempre presente generar un impacto medioambiental positivo, Photio es una climatech que, desde sus comienzos, dio que hablar no sólo en Chile, sino que en el extranjero. Ganadores de los recientes Premios Tecla 6, Talento Emprendedor de Caja Los Andes, Premios Verdes 2023 (startup de mayor impacto socioambiental de Iberoamérica), Venture Day Chile, PwC Chile Innovación, Premio Nacional de Innovación Avonni 2022 (Recursos Naturales y Medio Ambiente), entre muchos otros, acaban de llegar de la Expo Live Innovation Programme en Dubái, donde además de exponer sobre este emprendimiento, made in Chile, están a la espera de los resultados para ser parte de la cumbre climática COP28 que se realizará en esta ciudad.
“El 2017, empezamos a desarrollar nuestro concepto. Con Jaime éramos compañeros de Ingeniería Civil de Minas, él estaba terminando su memoria y yo mi tesis; Constanza estudiaba Ingeniera Civil Química y también estaba finalizando su memoria. Los tres trabajábamos en el mismo laboratorio de metalurgia en la Universidad de Chile y surgió la inquietud de resolver el problema de la contaminación en minería, particularmente dentro del rajo y los túneles, pues era un gran problema la calidad del aire y los contaminantes acumulados”, recuerda.
Su propuesta fue implementar arbustos de bajo consumo y que fueran capaces de capturar grandes cantidades de CO2, pero no fue viable. “Ese primer no, nos ayudó a ser lo que somos hoy. Al tener la restricción de no poder plantar ‘algo vivo’ empezamos a trabajar en cómo generar una reacción fotoquímica tal como los árboles, pero sin la necesidad de tener una hoja ni un proceso biológico de por medio. Así llegamos a la nanotecnología y, también, a las complicaciones que trae trabajar con nanopartículas, porque se necesitan equipamientos y laboratorios especiales”.
¿Cómo lograr el primer empuje?
La clave fue validarnos, empezamos rápidamente a participar en una gran cantidad de fondos y concursos de innovación en Chile y el extranjero. También a mover nuestras redes sociales y a hacer ruido. Paralelamente a nuestros trabajos estables (que paulatinamente fuimos dejando), trabajábamos para afirmar este proyecto, porque los tres teníamos en común la motivación de generar algo con impacto, de dejar una huella en las personas y en el planeta. Aprendimos mucho sobre la marcha, pues somos ingenieros y poco sabíamos de innovación. De tener laboratorios en nuestras casas hoy nos acabamos de cambiar a un laboratorio de mayor escala, tenemos un equipo de profesionales y más de cincuenta clientes.
Ustedes comenzaron trabajando con pinturas…
Sí y, gracias a ello, nos dimos cuenta de que no queríamos casarnos sólo con un tipo de producto, sino ser una herramienta para incorporar en muchos materiales. En ese momento nos ofrecieron comprarnos la tecnología y no quisimos. Y actualmente las tres empresas más grandes de pinturas de Chile quieren trabajar con nosotros.
VALIDACIONES
En agosto de 2019 se marcó un hito para Photio cuando recibieron el premio 100K Latam, categoría pitch, concurso de emprendimiento e innovación más importante de la región, el cual es desarrollado por el Instituto Tecnológico de Buenos Aires con el apoyo del MIT Sloan Latin America Office. “Recibimos nuestro primer reconocimiento internacional justo antes del estallido social. Fue la primera vez que los tres viajamos a presentar nuestra idea al extranjero, a más de mil personas, y nos dimos cuenta del impacto que tenía Photio”. El 2021 volvieron a ganar este reconocimiento por la categoría launch.
¿Qué otras instituciones los han apoyado?
Desde la Universidad de Chile, que fue la primera en apoyarnos en el desarrollo, hasta la incubadora de negocios Innovo Usach, CORFO y Know How Chile, especialistas en innovación y transferencia tecnológica, quienes nos ayudaron a validarnos en Europa y Estados Unidos. Además, estamos validados por la Pontificia Universidad Católica de Chile y la Universidad de California, en Riverside; y tenemos alianzas con laboratorios de Chile, Italia, Irlanda e Inglaterra.
“No podemos dejar de mencionar a Banco de Chile, pues fuimos ganadores del Sexto Concurso Desafío Emprendedor 2022, categoría microempresas. Ese fue nuestro primer programa televisado y que nos abrió muchísimas puertas. Una vitrina que nos sigue dando frutos, ya que estamos pintando todas sus sucursales; y este 2023 me invitaron a ser jurado de la gran final de Desafío Emprendedor. También agradecemos a Caja Los Andes, ganamos Tecla 4 y este año Tecla 6, un premio que está enfocado en la internacionalización, y tenemos varios proyectos con ellos”.
Por otro lado, este año lograron su primera ronda de inversión pre-seed de seiscientos mil dólares, a través del inversionista ángel Guillermo Maripán, futbolista chileno que comparte su misma visión medioambiental y los invitó a Mónaco a cerrar el acuerdo.
“PHOTIOSINTESIS”
“Todos los días escuchamos de la contaminación atmosférica, hablamos del esmog sobre las ciudades, pero como no lo vemos, no nos damos cuenta del daño real que está provocando. Es un enemigo invisible para nuestra salud. Por eso, de la mano de las validaciones y monitoreos, también salimos a las calles a través de intervenciones artísticas. Partimos con un amigo y artista callejero, Cristóbal Persona, que quiso eliminar los gases contaminantes a través de maravillosos murales. También con La Loica, muralista que participó en el Festival Hecho en Casa y pintó con Photio parte de la Torre Entel… después Primavera Viva, Lollapalooza, la intervención del Parque la Familia en Santiago, estaciones de metro, canchas de fútbol y la autopista central, etc.”.
“Hoy a través de nuestra propia productora, estamos pintando junto a distintos artistas la ciudad, para generar murales de aire puro. Se habla mucho de que son las empresas y los gobiernos responsables de combatir el cambio climático, pero es importante que esa motivación también venga desde lo cotidiano y que todos podamos aportar desde nuestra vereda. Por eso queremos seguir escalando y que tal como se masificaron las nanopartículas de cobre, podamos ver nuestro aditivo diariamente en muros, muebles y ropa”.
Pero su compromiso como empresa de triple impacto ha ido también de la mano con la educación medioambiental y constantemente realizan charlas en colegios, universidades e institutos.
¿El próximo paso es en el extranjero?
Sin duda, pero primero buscamos consolidarnos aquí. Aún no hemos lanzado el producto de manera masiva y nos hemos concentrado en trabajar directamente con empresas, por ejemplo, con inmobiliarias y constructoras en la aplicación de pinturas. Este año queremos lanzar dos o tres productos nuevos para mostrar que no sólo es un aditivo, sino que un material o un producto final. Chile es nuestro mercado de prueba para la internacionalización y para entender dónde más podemos incorporar nuestra tecnología, pues hoy también nos encontramos trabajando en la minería, que fue el pie inicial de todo esto.
“Tenemos un plan estratégico enfocado en el mercado europeo y norteamericano, principalmente, porque allá tienen muy bien reguladas las normativas en cuanto a contaminación atmosférica, en Chile seguimos al debe. Venimos llegando de Dubái, gran referente de innovación; el año pasado estuve dos meses en Silicon Valley, California, y este año vamos a Francia en busca de partners estratégicos, pues nuestro modelo se basa en la colaboración con otras empresas. Para el próximo año estamos abriendo otra ronda de inversión, para ir transformándonos en un referente mundial en temas de sustentabilidad y nanotecnología… queremos que se siga conociendo la Photiosintesis”.
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