Con la llegada de la primavera, las flores cobran más protagonismo que nunca, aunque Daniela trabaja con ellas desde que tiene uso de razón. Con la agilidad que solo dan los años de práctica, arma y combina a la perfección arreglos no solo con diseños notables, sino que también teatrales y emotivos. En estas páginas, la puesta en escena de esta artista plástica que reparte sus días entre Santiago, Valparaíso y su tienda Pop Up en Zapallar.
Por Macarena Ríos R./ Fotografías Andrea Barceló
Dice que sus arreglos son sueltos y emotivos y que esa soltura se debe a que ha vuelto a mirar pinturas de arte y a bailar danza. En @mescene se pueden ver varios de ellos, algunos denominados “aéreos” y diversos montajes más lúdicos y con aires teatrales, aunque ella prefiere llamarlos diseño o intervención floral. “Trabajo con la emoción, las plantas transmiten mucha energía. Desde chica, en el campo y en la playa, mi entretención favorita era, y sigue siendo, recolectar pedazos del mundo… conchitas, piedras, flores. Con el tiempo, y ya de grande, al trabajar ambientando eventos, las flores volvieron a mí con creces y decidí especializarme en ellas”.
Los días los reparte entre cursos y talleres de distinto formato: floristería básica —donde enseña a armar ramos, centros de mesa, arreglos para ceremonias e iglesias, coronas, arcos y un largo etcétera—, talleres personalizados, pensados en potenciar marcas con estilo propio, y sus favoritos; los talleres intensivos que duran, por lo general, todo un fin de semana, “con un enfoque muy creativo y una notable puesta en escena, orientados a gente que quiere perfeccionarse o, simplemente, pasar un tiempo personal enriquecedor”.
¿Tu flor favorita?
No tengo, depende mucho del momento y del estado de ánimo, de la estación del año o de cómo se combine con otras. A pesar de eso, tengo especial relación con los aromos por su llamada a la primavera, su color llamativo y porque están siempre en paisajes que revisito; las camelias, por su forma y el recuerdo de mi abuela, la nostalgia que me produce la infancia en el campo; los iris por su forma tan expresiva, incluso erótica; los jazmines por su aroma, caída y soltura entre jardines; las anémonas y amapolas por sus pétalos como de papel, su silvestre florecer y lo coquetas que son.
¿Un color?
Históricamente han sido el azulino y el turquesa, pero actualmente estoy en una paleta de tonos opacos, como aparentemente incombinables… terracotas, naranjos, rosados pálidos, lilas, rojos, burdeos, mostazas, amarillos.
¿Qué te inspira para crear?
La naturaleza misma. Mi respiración, mi andar, hasta mi pelo se sienten a gusto cuando estoy inmersa en los paisajes, ¡me llenan como la mejor terapia! De ahí también salen formas e imaginación para intervenir rincones con arreglos florales, y bueno, mi propia materia prima viene de ahí y ella me va dictando mucho qué hacer con las manos. También me inspiran las buenas películas, los viajes fuera de Chile y los paseos acá, los ambientes lindos, cuidados, espontáneos, las ferias de antigüedades. Soy tremendamente visual y sensible.
MISE EN SCÈNE
Bajo la marca Mise en Scène —puesta en escena en francés—, Daniela crea distintos ambientes para matrimonios, desfiles y celebraciones varias. “El concepto de “puesta en escena” se usa en escenografía, teatro, arte e incluso leyes. Yo me lo “tomé” para hablar de un todo integral y desde ahí tener la libertad de crear lo que se me ocurriera”, explica.
Ese “todo integral” del que habla va más allá de la floristería; tiene que ver con la intervención de los espacios, el tipo de iluminación, la mantelería, las velas, el diseño, las texturas, para que todo, en su conjunto, genere sensaciones en las personas. “Últimamente estoy trabajando una línea más creativa-experimental. No ha sido fácil dar a entender lo que hago, pero ha dado pie para abrir la conversación de lo que hace una artista visual, tanto en el área eventos, como en la floristería y la decoración, donde todo se ve involucrado”.
¿Cómo fue abrir la tienda en Zapallar?
Pop Up Zapallar comenzó siendo una tienda temporal durante el verano pasado, pero finalmente me quedé con el lugar que abro los fines de semana largos y en las vacaciones. Ahí comparto de todo, porque es un sitio a donde los veraneantes llegan relajados y se presta para conversar y ser un punto de encuentro. La gente considera la tienda-taller como parte de su recorrido y como siempre estamos renovando las cosas y la manera de presentarlas con mi mamá (Beatriz), al público le encanta.
¿Cuáles flores duran más?
A grandes rasgos diría que la familia de los leucadendron, los crisantemos, los liliums y ciertas flores puntuales como las craspedias, por ejemplo.
¿Consejos para mantener un arreglo por más tiempo?
Cortar los tallos unos tres centímetros luego de comprar las flores y sacarles las hojas. Darles agua fresca y ponerlas en lugar fresco. El peor enemigo de las flores es el sol directo y la calefacción. Unas gotitas de cloro diluidas en el agua, permiten que se mantenga más cristalina y evita el mal olor.
¿Cuáles son las flores de relleno y qué significa que sirvan de “follaje”?
Yo les llamo así a las flores que podrían pasar por follaje, como el solidago o el limonium, y que no sólo sirven de relleno sino que le dan carácter a un arreglo. Pasan a ser menos protagonistas, aunque no menos importantes, que flores como las peonías, lisianthus y tulipanes, pero sí las sostienen, acompañan y dan buena soltura al arreglo.
¿Existe una flor para cada ocasión?
En realidad todas las flores se pueden usar para cualquier ocasión, dependiendo de la disponibilidad según la temporada, pero el punto es darles una intención para que calcen con el estilo del lugar, eso es lo importante. Uno puede llegar a distintos resultados usando diversos ingredientes, si se tiene claro el efecto que queremos provocar, además del contexto en el que estarán situadas.
¿Qué recomiendas para un almuerzo campestre?
Para un arreglo campestre, insisto, la elección de las flores tiene que ver con el gusto de cada persona, eso sí, manteniendo una forma suelta y relajada en el armado. También se puede usar harto follaje para complementar, ya sea directo sobre la mesa o al interior de un arreglo.
¿Para fiestas y celebraciones de noche?
Colores no muy oscuros para que sobresalgan. Dependerá del estilo y el colorido del lugar, incluso de la arquitectura y de la ocasión, ¡hay mil opciones! Es muy distinto plantear arreglos para una fiesta de aniversario que para una comida de viernes con amigos o si la casa es minimalista, versus barroca. Y atreverse a mezclar nomás, el combinar con copas de colores y lindos platos o mantelería, siempre dará un plus.
¿Los imperdibles para ambientar la casa?
Un buen kit de floreros en distintos materiales, tamaños y formas. Velas, velitas, velones, flores, obvio, y tu toque personal.
¿Cuáles son las tendencias en arreglos florales?
Desde hace un par de años, se ve un concepto más bohemio, de colores crudos, que incorporan materiales como las colas de zorro. Últimamente se viene una fuerte vuelta a los años ochenta, de colorido saturado, uso de flores pintadas con espray y líneas más geométricas. Personalmente, no me siento cómoda con ninguna moda, soy de la idea de dejar de mirar siempre al referente gringo o europeo.
“Últimamente estoy trabajando una línea más creativa-experimental”.
“Para decorar, hay que atreverse a mezclar nomás, el combinar con copas de colores y lindos platos o mantelería, siempre dará un plus”.
