Los Molles: descubre la capital del buceo en Chile y su increíble vida marina

Que en Chile casi no se bucea. Que hay muy poco que ver, que el agua es turbia. Que para bucear hay que ir al Caribe. ¿Es verdad eso? Visitamos Los Molles, la capital del buceo en Chile, y nos sumergimos. Juzgue usted lo que nos depara el mundo marino.

Texto y fotografía: Rodrigo Ponce V. (@rodrigoponce y @larutadelbuceo en IG)

Chile es un país con miles de kilómetros de costa y, sin embargo, no somos un pueblo que se vuelque al mar con naturalidad, salvo yendo a la playa en verano. Muy poca gente disfruta el mar en su inmensidad, ya sea navegando o buceando, qué poca cantidad de productos del mar consumimos y, peor aún, qué desconocimiento tenemos de los distintos habitantes de nuestro mar, ya sea flora o fauna.

Por lo anterior, es que llegamos a la caleta de Los Molles, en la región de Valparaíso, para conocer un poco más de este entorno marino de la forma más directa posible: ¡metiéndonos al agua!

En este lugar, conocido como la capital del buceo en Chile, nos recibe Guido Arce, instructor de buceo con vasta experiencia, quien es, además, propietario del centro de buceo Scuba Adventure Chile (www.scubadventure.cl). Guido nos cuenta que el centro de buceo reúne todos los implementos necesarios para una buena y segura práctica del buceo. “Como centro de buceo, nuestra prioridad ha sido siempre que las condiciones, tanto de comodidad como se seguridad, cumplan con los más altos estándares. Contamos con equipos que se mantienen siempre en excelente estado, trajes cómodos. Hacemos revisiones periódicas para que nada falle, y tenemos, además, una tienda en Santiago (y disponible para compras online) para surtir a los buzos con equipos de la mejor calidad. Todo lo anterior apoyado con el trabajo de nuestros instructores y guías de buceo, siempre atentos al cuidado y la seguridad”.

BAUTISMO SUBMARINO

Pero entonces ¿sólo nos metemos al agua? Guido nos cuenta que, básicamente, hay dos modalidades: “Si es tu primera vez en el buceo y quieres ver cómo es el fondo marino, la opción es contratar un ‘Bautismo Submarino’. Este programa consta de una introducción al mundo del buceo, en donde se entregan a nuestros clientes conceptos básicos, así como funcionamiento del equipo, que en realidad es bastante simple. Ponemos a disposición de nuestros clientes todo lo necesario para que su ingreso al mar sea placentero y provechoso”. Como es primera experiencia, los buzos novatos descienden a una profundidad máxima de diez o doce metros, siempre acompañados de un instructor que los ayudará a descender y se mantendrá siempre a su lado, hasta que estén de regreso en el bote, por lo que es una actividad muy segura.

Y luego, si me gustó el bautismo y quiero más, ¿qué hago? El próximo paso es obtener la licencia de buzo, para lo cual hay que hacer un curso. Una vez aprobado, se obtiene la licencia de buzo recreativo, la que permite bucear en todos lados, ya sea en Chile o en el extranjero. Guido Arce nos señala que “hay varias instituciones que otorgan la licencia de buzo. Nosotros estamos certificados y nos regimos por las normas PADI (quizás la más grande y conocida a nivel mundial), pero existen otras, y mientras sean reconocidas son útiles para bucear en nuestro centro. Como centro de buceo, Scuba Adventure ofrece

cursos a los futuros buzos, desde la más básica (open Water Diver) hasta las más avanzadas como Dive Master o Master Scuba Diver”. Cabe señalar que estas últimas permiten bucear un poco más profundo y ciertas especializaciones, como buceo nocturno, visita de naufragios, fotografía submarina, etc.

Entonces, ya aclarado qué necesitamos para conocer este mundo nuevo, no queda más que equiparse, subirse al bote y meterse al agua.

MICROMUNDO MARINO

En Los Molles existen muchos y variados “puntos de buceo”, lugares que son muy conocidos por los instructores y, por lo tanto, su belleza y seguridad están garantizados. Nombres como Arcoíris, Catedral, Guarapalo, La Lobería, por nombrar algunos, son los que usualmente se recorren; no obstante, se está en una búsqueda constante de nuevos puntos, y descubrir así nuevas geografías o concentraciones de fauna.

Luego de una rápida navegación, llegamos al punto donde decidimos bucear. Tras chequear nuevamente el equipo ponemos todo en su lugar y… al agua. Nos sumergimos hasta los quince o veinte metros y lo que vemos es maravilloso: grandes paredes de rocas descienden verticales hasta donde casi se pierde la vista, mientras cardúmenes de castañetas pasan frente a nuestros ojos. Otros peces como rollizos, bilagay y viejas circulan entre las rocas y entre las algas para protegerse.

Resulta curioso, al principio, ver muchos colores en las rocas y cuando nos acercamos se nos devela un micromundo difícil de imaginar: pequeños peces como los trombollitos, nudibranquios o babosas de mar, tan pequeños como coloridos, actinias que parecen flores, pero son animales, estrellas de mar de variedades distintas, picorocos, y un largo etcétera.

“La cantidad de biomasa existente en este lugar es importante. Contamos con una larga lista de peces que se dejan ver todo el año, invertebrados, camarones, jaibas y cangrejos. Según la época del año, vemos especies que llegan según la temporada, como medusas enormes, sargas. De vez en cuando, los delfines nos acompañan en la navegación y hemos visto ballenas de la variedad fin y jorobada. Colonias de locos, peces que viven dentro de las conchas vacías de picorocos y rayas es también habitual ver acá” nos cuenta Guido. “Chile, con sus miles de kilómetros de costa, nos da la posibilidad de bucearlo en su totalidad, desde las aguas un poco más tibias del norte hasta la fría Patagonia, encontrando en todos los lugares una flora y fauna abundante y diversa. ¿El caribe? Claro, es distinto, pero no mejor. Más tibio y con especies muy coloridas, pero Los Molles no tiene mucho que envidiarle”.

Un poco abrumados por la cantidad y diversidad de vida que tenemos delante de nuestros ojos, nos disponemos a disparar nuestra cámara y tratar de inmortalizar lo que vemos. Una cosa es leerlo, otra es verlo. Una imagen vale más que mil palabras, dicen. Pase a ver lo que registramos y decida usted. ¡Los esperamos en Los Molles, capital del buceo en Chile!