Con el talento de un político

EL ENCARGADO. DISNEY+

Eliseo está a punto de cumplir treinta años como conserje de un edificio en Barrancas de Belgrano, un barrio acomodado tradicional de Buenos Aires, mix de arquitectura clásica y moderna en calles arboladas, cuando se entera de la intención de algunos miembros del comité de residentes de disponer de la terraza del último piso, para convertirlo en una piscina con áreas de esparcimiento. El proyecto involucra derribar la pequeña residencia levantada en el lugar, que él habita solitariamente tras enviudar a temprana edad.

Lo de la piscina es lo de menos frente a la intención de prescindir de sus servicios y tercerizar las funciones que presta como el encargado, la nomenclatura trasandina para un rol de consejería que involucra también labores de mantenimiento y administrativas. Cuando Eliseo es informado del plan que, básicamente, lo borra del mapa del edificio para bajar los costos —la obsesión de toda plana administrativa de un conjunto residencial—, sonríe y manifiesta su absoluta comprensión. Es más. Él mismo siempre fue de la idea —asegura— de que el sitio merecía una pileta, como llaman los argentinos a las piscinas.

Eliseo se expresa con aparente sinceridad, pero maniobra en las sombras para revertir la situación con recursos retorcidos. Antes que encargado, actúa como un policía corrupto que toma detallada nota de la conducta de los residentes, para detectar sus debilidades y explotarlas a su favor con toda clase de artimañas.

Protagonizada por uno de los capos de la comedia argentina como Guillermo Francella (69), y producida por Mario Cohn y Gastón Duprat, un tándem de éxito reconocido en la producción audiovisual trasandina de ribetes internacionales, El encargado es una comedia negra que retrata ese micromundo que implica cada comunidad habitacional, donde intersectan personalidades de distinto espesor y costumbres. En Eliseo hay tanto un fisgón como un político que mueve los hilos a su favor, fingiendo que es en beneficio de todos.

Ágil, bien actuada y con momentos de comicidad manejados por el oficio de Guillermo Francella, El encargado es un enésimo reflejo de la calidad superior de la manufactura argentina en materia de series, a nivel hispanoamericano