El dinamismo y crecimiento de nuestra conurbación La Serena-Coquimbo nos brinda, hoy, la oportunidad de potenciar y proyectar cómo soñamos la ciudad. Sumarse a este y otros desafíos es la invitación que extiende el líder regional del gremio a todos los actores involucrados, priorizando para ello una visión común, planificada y a largo plazo. Su leit motiv obedece a la irrestricta misión gremial: mejorar la calidad de vida de las personas, comprometidos con el desarrollo sostenible del sector construcción.
Por Verónica Ramos B. / Fotografía: Francisco Díaz U.
Hace treinta y siete años que el arquitecto de la Universidad Católica de Valparaíso, Eduardo Soto (64), vive en La Serena, ciudad donde varias de sus obras arquitectónicas tienen su sello, entre ellas, el edificio de CONAF, los colegios Alemán, Águila Mayor y Amalia Errázuriz de Ovalle, el Terminal de Buses de Coquimbo, las bodegas de la CCU en Tierras Blancas y Copiapó, las bodegas de vino de Falernia, de Casa Tamaya y de Dalbosco y el diseño de las actuales oficinas de la Cámara Chilena de la Construcción La Serena.
Su larga permanencia en la zona le ha permitido ser testigo del fuerte crecimiento y desarrollo de la conurbación La Serena-Coquimbo, situada como primera área metropolitana del norte de Chile, a lo que se suma su conocimiento e interés por la historia, cultura y patrimonio de la ciudad, lo que lo llevó a ser presidente de la Comisión de Urbanismo de la CChC La Serena y, más tarde, consejero nacional. En el 2018, integró la Mesa Directiva Regional como vicepresidente gremial y, en julio de este año, fue elegido por sus pares para liderar esta cámara regional.
Desde entonces, alineado en fortalecer la hoja de ruta nacional Construye Futuro, ha enfocado su gestión, especialmente, en contribuir y proponer una visión consensuada y a largo plazo de la ciudad que soñamos y queremos. Con ello, asumió el desafío que implica una mejor planificación y una equitativa inversión del territorio. “A las ciudades de La Serena y Coquimbo no podemos entenderlas como unidades urbanas diferentes, por el contrario, debemos considerar sus particularidades e identidades y convertirlas en una unidad territorial urbana única y sostenible. Nos une la bahía, los cerros, las quebradas, los humedales y tantos otros elementos que nos permitirán identificarnos con mayor facilidad como una unidad urbana potente y de gran proyección”, enfatiza.
¿Qué le falta a nuestra conurbación?
Estamos al debe respecto a superficie de áreas verdes por habitantes, debemos mejorar el enlace vial entre ambas comunas, contemplar el diseño eficiente de un tranvía y materializar el proyecto de un teatro regional con un diseño armónico y sostenible. Es necesario mejorar y consolidar nuestro borde costero, así como también, compartir y no competir en la formulación de obras emblemáticas.
La Serena aún no cuenta con la aprobación del Plan Regulador Comunal, lo que dificulta la adecuada planificación territorial que se plantea
Las autoridades comunales y regionales, han realizado las gestiones pertinentes para su actualización y se espera, según los señalado por fuentes municipales, que este instrumento sea aprobado en marzo o abril del próximo año.
Y el déficit de infraestructura en salud pública de la conurbación se verá subsanado, en parte, con la futura construcción del Hospital de La Serena
Esta ha sido una excelente noticia para la comunidad y para toda la región, ya que la CORDEP de la CChC cedió el terreno donde será construido el nuevo hospital de esta ciudad. Lo que ha hecho el gremio es priorizar el bien superior de esta futura obra, lo que ayudará a disminuir la deuda histórica que existe en la zona en materia de salud, ya que contará con alrededor de seiscientas noventa camas, más de veinte pabellones, servicio de urgencia y un centro oncológico.
¿Cuál es su propuesta para cumplir con los lineamientos y tareas?
Además de avanzar en este concepto común de visión ciudad —en el que pondremos todos nuestros esfuerzos para generar una mesa de trabajo público-privada y así contar con los lineamientos para el desarrollo de nuestra conurbación—, continuaremos revisando el estado de avance de los planes reguladores comunales. Procuramos, también, generar una mayor certeza para construir y renovar las Zonas Típicas, a través de un estudio urbano que nos permita fortalecer, innovar y proteger el patrimonio por medio de la inversión, esto a efecto de que los proyectos no queden entrampados en procesos de aprobación complejos y dificultosos.
CONSTRUIR: OBRA DE TODOS
Nuestro país ha vivido álgidos momentos producto de la insatisfacción e inequidad social y hemos visto cómo la violencia y la destrucción se han desatado. ¿Cuál es su visión al respecto?
Nuestro gremio privilegia la seguridad, la tranquilidad, la cordura, el diálogo y apoyaremos lo que sea necesario para construir acuerdos e iniciativas que tiendan al bien común. Sin duda, toda esta destrucción, los saqueos y las quemas son un tremendo daño a nosotros mismos, a nuestras obras, edificios, al patrimonio e infraestructura, a todo lo que nos ha costado tanto construir y levantar. Debemos conversar, reflexionar y contribuir con decisiones bien pensadas, que ayuden a resolver los problemas más urgentes de nuestra sociedad.
Esta cámara regional entregó a las autoridades locales el proyecto Parque Intercomunal Quebrada de Peñuelas, ¿qué significaría para ambas comunas que llegase a materializarse?
Este proyecto está emplazado en el límite común de La Serena y Coquimbo. Qué mejor que un parque sustentable, seguro, que contribuya a mejorar la calidad de vida de nuestros habitantes, que integre a nuestras ciudades y sea un aporte concreto de nuestra parte a la conurbación. Este proyecto ha sido muy bien recibido por las autoridades locales, de manera que esperamos se priorice y logre su financiamiento.
¿De qué manera podría impactar la reducción de la jornada laboral a 40 horas semanales, en la industria de la construcción?
De acuerdo a un estudio realizado por la Gerencia de Asuntos Públicos de la CChC, esta iniciativa legal impactaría en el costo de la mano de obra, la cual aumentaría en un veinte por ciento y en el costo de la vivienda con un incremento del 5,4. Evidentemente, nos preocupan los efectos negativos de un proyecto de ley que se ha centrado en una discusión, sin mayores antecedentes. Nos encontramos con un escenario complejo, negativo para nuestra industria y muy pesimista para el bolsillo de todos los chilenos, más aún, considerando la contingencia social.
Comprar una vivienda en Chile es inalcanzable, según un estudio realizado por la CChC, y La Serena se ubica en el cuarto lugar con mayor dificultad para acceder a una vivienda ¿qué soluciones plantea el gremio al respecto?
Nuestra propuesta como gremio es una planificación urbana integrada y de largo plazo, que asegure la provisión de suelo urbano para mantener una adecuada oferta de viviendas. Considerar una autoridad metropolitana como una nueva forma de gobernar las ciudades; contemplar una densificación equilibrada e inclusiva en zonas aledañas a la infraestructura pública de alto estándar; crear una nueva y potente política de arriendos donde participe el sector público y privado y construir, lo antes posible, acuerdos que nos permitan avanzar en estas soluciones.
Y en materia de innovación ¿cómo enfrenta la industria de la construcción la llamada cuarta revolución industrial?
Sumándonos a este desafío, porque la construcción es el sector productivo menos digitalizado, de manera que debemos mirar el futuro incorporando en nuestro quehacer la transformación y construcción digital. Del 27 al 29 de noviembre se realizará, en nuestro país, el primer Congreso Latinoamericano Construcción 4.0, y La Serena será la ciudad anfitriona de este gran evento, organizado por la CDT de la CChC y CORFO.