El deber ser. Shigeru Ban

Por Jessica Luna, arquitecta

Las consecuencias del incremento en la temperatura del planeta son cada vez más evidentes y los fenómenos meteorológicos inusuales constituyen hoy más la norma que la excepción. Los incendios, las sequías y el derretimiento de los glaciares se han vuelto cada vez más frecuentes, igual que las lluvias y la actividad sísmica. Estos fenómenos se han traducido en zonas de catástrofes cada vez más complejas y masivas, con pérdidas de vidas humanas y bienes familiares, forzando importantes migraciones. Un ejemplo son las migraciones infantiles, que solo en estos últimos seis años, fueron más de cuarenta millones. Una problemática crítica en los campamentos para damnificados son las condiciones de habitabilidad. Los recursos para esto suelen ser escasos y quienes son capaces de brindar soluciones simples e innovadoras a partir del buen oficio, también.

Shigeru Ban, arquitecto japonés (Tokio 1957), por más de veinticinco años se ha desplazado a zonas de desastres naturales para establecer y colaborar con equipos de ciudadanos locales, voluntarios y estudiantes; para diseñar y construir diversos tipos de edificaciones de bajo costo que brinden soluciones temporales de habitabilidad a las víctimas de desastres. Su formación como arquitecto se inició en California y terminó en Nueva York en Cooper Union. En 1985 regresó a Japón para fundar Shigeru Ban Architects, y diez años más tarde se convirtió en consultor del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), fundando paralelamente la ONG Voluntary Architects’ Network (VAN). Se define a sí mismo como el único arquitecto del mundo que ejecuta edificaciones de papel, pues ya en 1986, mucho antes de que se popularizaran los temas sobre la sustentabilidad, comenzó a probar al tubo de cartón como elemento estructural, básicamente por su carácter efímero, de bajo impacto, costos accesibles y su notable resistencia. Uno de sus proyectos emblemáticos en sus inicios con este material fue la Biblioteca para un Poeta en Kanagawa, Japón (1990).

La ausencia de arquitectos en terreno tras catástrofes y la mala calidad de las instalaciones de emergencia llamaron su atención. Su primera intervención con viviendas temporales fue en Ruanda (1994) y luego en Kobe, Japón (1995), donde además construyó la Iglesia de Papel. De ahí en adelante fue imparable visitando áreas de desastres, brindando soluciones innovadoras con materiales locales de fácil adquisición como cartón, madera, tejidos y compuestos reciclados de fibra de papel y plástico, desarrollando soluciones estructurales innovadoras, ejecutables en muy breve tiempo.

La trayectoria de Shigeru es más bien cosmopolita por formación y atípica por convicción, con obras un tanto transgresoras en lo privado y en lo público. Buen ejemplo de ello son el Estudio Temporal de Papel encaramado sobre una terraza del Centro Pompidou, y el Museo Nómada, para la muestra itinerante del fotógrafo canadiense Gregory Colbert. Con oficinas en Tokio, París y Nueva York, su trabajo entrecruza diversas escuelas, desarrollando una línea de trabajo de excelencia en el diseño ambiental y ecológico, con una inventiva y pureza espacial y un impecable rigor constructivo. Ha recibido innumerables reconocimientos, destacando Premio Pritzker de Arquitectura (2014), Medalla de Honor Cinta Púrpura, Japón (2017), Premio Princesa de Asturias de la Concordia (2022). Entre sus proyectos más recientes destacan SIMOSE (Museo de Arte SIMOSE + Villa Jardin) Otake, Hiroshima, Japón; y la publicación de su último libro Timber in Architecture.