El año pasado fue uno de los mejores en su vida. Varios de sus proyectos se hicieron realidad y logró posicionarse como experta en comida sana. Ya aseguró la tercera temporada de su programa Mi lado dulce y saludable, está a punto de lanzar su libro y, lo más importante, está feliz con la mujer que hoy reconoce frente al espejo y frente a su propia vida. Esta es la Connie: sencilla, simpática, honesta y generosa con sus conocimientos. No por nada, las redes sociales la tienen convertida en una de sus favoritas.
Este proyecto asociativo busca motivar, incentivar y desarrollar habilidades comunitarias, deportivas, culturales, educacionales y de emprendimiento para ayudar a las personas que viven en sectores vulnerables a superarse a partir de su propio esfuerzo. Los profesionales a cargo de esta iniciativa partieron trabajando en los cerros de Antofagasta pero sueñan con extender esta metodología por todo el país y Latinoamérica.